El diagrama de Hertzsprung-Russell es una de las gráficas más conocidas en astrofísica. Representa la magnitud absoluta de las estrellas ─para entendernos, el brillo─, en el eje de ordenadas, frente a la clase espectral de la misma ─la temperatura─, en abscisas.
La mayor parte de las estrellas se aglutinan en torno a lo que se denomina Secuencia Principal, y es que, cuanto mayor es la temperatura de una estrella mayor suele ser también su brillo. Sin embargo, existen un par de notables excepciones: las gigantes rojas y las enanas blancas.
Las gigantes rojas son estrellas de "baja" temperatura y gran brillo (debido a su inmenso tamaño), de ahí que se sitúen en la esquina superior derecha del diagrama H-R. Se las denomina rojas porque al ser estrellas "frías" emiten radiación electromagnética a esas longitudes de ondas (recuérdese que una llama de color rojo es menos energética que una llama azulada). Por su parte, las enanas blancas son estrellas poco luminosas pero muy calientes. A ellas se reserva, por tanto, la esquina inferior izquierda del diagrama.
Según su clase espectral las estrellas se enumeran, de mayor a menor temperatura, con una de las siguientes letras: O, B, A, F, G, K, M. Como regla nemotécnica para recordar dicha secuencia suele usarse la frase: “Oh, Be A Fine Girl, Kiss Me”, todo un clásico en astrofísica, aunque yo tengo versión propia: funny en lugar de fine (nada me lo impide).
Y ya para acabar, y a modo de curiosidad, deciros que nuestro Sol es una estrella de segunda generación (formada a partir de los restos dejados por una explosión supernova), no muy grande en tamaño y tampoco demasiado caliente (más bien fría), del tipo G, según la nomenclatura que acabamos de ver.
Nota: Entiendo que se puede vivir perfectamente sin noticia de estos datos, pero a algunos nos reporta una satisfacción muy placentera el conocerlos... Supongo que esta es una de esas entradas que todo bloguero se reserva para sí; se siente casi una necesidad imperiosa de publicarla. Me pareció un buen momento para hacerlo ahora, justo cuando se cumplen 100 años de la aparición del diagrama H-R (mes arriba, mes abajo). Ya aprovecho y la comparto con todos vosotros.