jueves, 20 de diciembre de 2012

¡Felices fiestas!



Llegadas estas fechas, unas fechas que para mí cada año se precipitan con más celeridad acabado agosto, parece que lo que procede es felicitar la Navidad. Pues a ello vamos sin más preámbulo: con unos días de adelanto (por aquello de salvar ese pequeño escollo del Fin del Mundo), ya pueden darse todos por felicitados desde No todo es kippel, su blog amigo.

A todo esto, decir que yo, cada año que pasa, con menos entusiasmo las recibo. Y es que, entre otras muchas cosas que no soporto (como los repetitivos anuncios de perfumes en televisión y esa extraña sensación de todo visto, todo vivido), me agobia ver estos días las calles y los comercios llenos de gente comprando sin ton ni son; ¿es ese el espíritu navideño del que todos hablan?, ¿quién dijo crisis?...

El regalar por imposición siempre me pareció un gesto absurdo, además de forzado. Tenemos días de sobra durante el resto del año, para hacer gala, de una manera mucho más personal, sentida y espontánea, de nuestro amor, cariño y agradecimiento por los demás. Cualquier día es bueno para regalar un detalle. Cualquier día, excepto los señalados a tal fin por el gremio de comerciantes. Para mí se está convirtiendo casi en una cuestión de principios llevar la contra (al menos, esa es la intención primera).

Pero bueno, no me hagan demasiado caso. Supongo que influye mucho la situación personal que atraviesa cada uno, el ir cumpliendo años (con el consiguiente desengaño en estos asuntos), y el capital, siempre menguante... Quédense, pues, con lo bueno que tienen estas fiestas (el reencuentro con la familia y la música, principalmente), desechen lo malo (que no es poco), y, después de esa pequeña gran abstracción, procuren disfrutarlas lo mejor que puedan.

Y recuerden: estoy en casa por Navidad. Pueden visitarme a cualquier hora. Serán bien recibidos ;)




"I'll be home for Christmas" (Dean Martin)

I'll be home for Christmas
You can plan on me
Please have snow and mistletoe
And presents at the Tree

Christmas Eve will find me
Where the love light gleams
I'll be home for Christmas
If only in my dreams

Christmas Eve will find me
Where the love light gleams
I'll be home for Christmas
If only in my dreams




Por último, no quisiera acabar esta sosa entrada sin agradecerles antes a todos el tiempo que invirtieron este año en visitar el blog pese al bajo ritmo de publicación que ostenta últimamente. Sinceramente, es para mí todo un honor seguir contando con su presencia. Como siempre digo, me dan ustedes mucho más de lo que yo puedo aportarles. Muchas gracias por estar ahí y felices fiestas.

¡Salud, amigos! Y mantel de lujo que ya está aquí el Cinco Jotas de la mano de Bing y Frank (onomatopéyicos nombres). Por si se aburren mientras se va organizando la Cena...

sábado, 1 de diciembre de 2012

Jazz Sessions (XLI)



Chet Baker. Tocó con los mejores. Tuvo unos años buenísimos, el mundo en sus manos. Hasta que la droga y él se cruzaron... Tuvo que ser muy triste ver cómo aquel prometedor muchacho de la Costa Oeste, ese blanquito que empezaba a despuntar con la trompeta, iba malogrando su vida, año tras año, hasta convertirse en un despojo. Su voz, sin embargo, ese suave y melancólico lamento, siguió susurrándonos al oído hasta el final de sus días. Al igual que su trompeta, una deliciosa caricia cargada de nostalgia.

Chet, la trompeta triste del jazz. "Let's get lost".






Notas:
  • Os recomiendo que veáis el documental homónimo de Bruce Weber (año 1988). Ciento veinte minutos desgarradores.
  • De igual forma, nadie debería pasar por alto el comentario que en esta misma entrada nos dejó el amigo Francisco Machuca (aquí). Realiza un retrato espléndido de este singular jazzista.