domingo, 24 de mayo de 2009

Encuentros cercanos

Establecer contacto con una civilización extraterrestre parece, a priori, una tarea bastante complicada, sobre todo si tenemos en cuenta las enormes distancias que nos separan de las estrellas y la gran cantidad de casualidades que deben darse para obrar el "milagro". Sin olvidarnos, además, de que una vez establecido el contacto tendríamos que entendernos con la otra especie, asunto el cual tampoco tiene por qué ser trivial.


No obstante, el Cosmos es lo suficientemente amplio y diverso como para albergar en sus cifras una pequeña fracción o resquicio para la esperanza. Como decía una frase de la película Contact: "Si estuviéramos solos en el Universo, ¡cuánto espacio desaprovechado!". Particularmente, me inclino por la opción de que la vida no es exclusiva del planeta Tierra. Y digo vida, sin calificarla necesariamente de inteligente. Obviamente, a menos que esa forma de vida haya logrado evolucionar hasta constituir una sociedad tecnológica avanzada, no sería posible ningún tipo de contacto bidireccional. En cualquiera de los dos casos (la existencia o no de vida fuera de nuestro planeta), la conclusión es extraordinaria; debería hacernos pensar.


El proyecto SETI para la Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre, a la cabeza del cual se situó durante muchos años Carl Sagan, lleva tiempo intentando encontrar ─de momento, infructuosamente─ señales inteligentes (de naturaleza no casual) mediante el análisis de las ondas electromagnéticas que captan nuestros radiotelescopios. Cualquiera de nosotros, desde su propia casa, puede contribuir al escudriñamiento de los cielos prestando parte de la potencia de cálculo de sus ordenadores al procesado digital de dichas señales. Para todo aquel interesado en la materia en cuestión, aquí dejo algo más de información.



Calling Occupants Of Interplanetary Craft
(The Recognized Anthem Of World Contact Day)
(The Carpenters, 1977)

5 comentarios:

Manuel J dijo...

Bonita canción. Esta chica que la canta, Karen Carpenter, murió de anorexia.

En un libro de Isaac Asimov, El Universo, te dan una idea de las distancias entre estrellas y galaxias hablando en proporciones. Primero te dan el diametro de la esfera terrestre, a partir de ahí, la distancia de nuestro planeta al sol, después del sol a la estrella más cercana... al final resulta imposible hacerse una idea realista de las magnitudes siderales. El cerebro no está acostumbrado a pensar en esas proporciones. Yo creo que podría existir vida inteligente en otro planeta, pero veo muy difícil establecer contacto con ellos.

Al leer ese libro de Asimov, conocer tantos datos me cayó como un jarro de agua fría: nunca veré formado el Imperio Galáctico y jamás veré al Halcón Milenario surcar los cielos. Snif.

Kinezoe dijo...

Desconocía, Manuel, el triste final de la cantante de los Carpenters. Lo que sí conozco, medianamente bien, es el libro de Asimov que citas en tu comentario. Como toda la obra divulgativa de este ilustre autor, El Universo, es también referencia obligada tanto para el aficionado a la Astronomía en particular, como para el amante del conocimiento científico en general.

En cuanto a la existencia o no de vida más allá de nuestro planeta, es una mera cuestión estadística el hecho de que, debido a la ingente cantidad de galaxias, estrellas y exoplanetas que pueblan nuestro vasto Universo, exista una probabilidad no despreciable de que haya podido surgir en otros mundos.

Se me hace muy difícil pensar que no exista siquiera una florecilla, o un simple y minúsculo vegetal, en millones y millones de años-luz a la redonda. De ahí al surgimiento de vida inteligente "tan sólo" habría que reducir en algunos órdenes de magnitud la probabilidad anterior. Pero repito, debe ser tan grande el número de estrellas existente, que aun mermando esta cifra seguiríamos teniendo una pequeña probabilidad para la existencia de inteligencia extraterrestre.

Desgraciadamente los números que manejamos son tran grandes que lo que sí es ya prácticamente imposible es que pudiera establecerse el contacto. Para ello, esos primeros signos de vida en sendos planetas deberían coincidir aproximadamente no sólo en el espacio (necesariamente tendríamos que estar hablando de un planeta en torno a una de nuestras estrellas vecinas), sino también en el tiempo (su desarrollo evolutivo tendría que haber sido más o menos paralelo al nuestro, porque de nada sirve intentar comunicarse con un paramecio situado a 200 millones de años-luz...). Este tema me fascina. :)

Saludos! Y muchas gracias por el comentario, Manuel.

Javier Márquez Sánchez dijo...

Este tema me ha apasionado desde niño. Es fascinante pensar todo lo que hay más allá de nuestra atmósfera. Es absurdo, completamente absurdo, pensar que un universo tan maravilloso y en continua expansión sea en este planeta en el único en el que exista vida. Estoy convencido de que deben existir cientos de miles de formas de vida diferente. Tal vez nunca lleguemos a conocerlas... o tal vez sí.

Luthien Palantir dijo...

Me encanta este tema, yo me he tragado montones de documentales sobre esto, y siempre termino todavía más convencida de que tiene que haber vida en algún lugar del Universo. El caso es que si se piensa, las condiciones del planeta en que se creara vida tendrían que ser iguales a las de la Tierra, o al menos muy parecidas, porque los demás planetas de nuestro Sistema Solar no están a la distancia adecuada del Sol, ni tienen las condiciones adecuadas para la vida, pero la Tierra está en la posición perfecta para que se cree vida... (aunque también podría ser que en un pasado hubiese vida en esos planetas pero no hubiese prosperado al no tener las condiciones óptimas o por cualquier otra razón)

Hubo un documental de estos que me hizo pensar, porque planteaba dos posibilidades: además de hacerte pensar que quizá podría haber vida en otros planetas, también terminaba diciendo algo que yo nunca me había planteado: ¿Y si resultase que la vida fuese algo extraordinario en el Universo y lo que ha pasado en la Tierra fuese una excepción?
Yo no creo eso del todo, siempre he sido de los que piensan que no podemos estar solos en el Universo, aunque no me extrañaría que la vida inteligente fuese una excepción... quién sabe, la verdad sólo el hecho de plantearlo me es más inquietante todavía que el que haya vida en otros planetas...

Kinezoe dijo...

Está claro, Javier, que existe vida en otros planetas. Tú mismo procedes de Krypton... ;)

Tu comentario, Luthien Palantir, me trae a la mente el Principio Antrópico. Según esta rama de la Cosmología el Universo es como es precisamente para explicar nuestra existencia. Cualquier pequeña variación en las constantes universales habría dado lugar a un Universo totalmente diferente en el que, probablemente, no hubiera podido desarrollarse la vida. Se trata de una propuesta que cada vez cuenta con más partidarios dentro de la comunidad científica. Seguiremos comentándolo en una futura entrada.

¡Saludos! Y gracias a ambos por vuestros comentarios.