¡Qué maravilla¡... Sabes, Kine, que conmigo siempre das en el clavo con la música, pues la clásica y el Jazz... es lo que más me mola...pero creo que ésto que hoy nos regalas es todo un presente para demostrarnos que nos quieres, ¡qué gozada¡
Y muchas felicidades por el blog, ¡que no te vayas¡ y no digo más.
Cuando algo me emociona mi mente se queda como bloqueada, alguna vez ya lo he comentado. Y así estoy después de escuchar esta maravilla. bloqueada. Bellísimo. Para reflexionar y hasta para echar una lagrimilla.
Cómo era eso que decían de su música.., que los movimientos alegres los había compuesto un genio y los lentos.., el mísmisimo Dios!.
Esas pausas antes de sus codas finales... pfff, hay que coger aliento!.
Este movimiento es maravilloso.
Yo quiero compartir con ustedes mi favorito de los movimientos lentos de los conciertos para piano de Mozart, el Adagio del n. 23: http://www.youtube.com/watch?v=teZ6mA_hE-c
Me encanta la palabra parsimonia, hacía mucho que no la escuchaba, debe ser que ya no se lleva hacer las cosas con calma y disfrutando de ellas. Buen finde
Unas palabritas siempre se agradecen. Poco sentido le veo a este invento sin la realimentación de los comentarios. Ya sabéis que mis entradas son muchas veces mero MacGuffin, la excusa perfecta para conversar un rato.
La segunda vez que aparece en el blog. Para que os hagáis una idea de lo que me gusta esta pieza...
ResponderEliminarPaz.
Oooohh¡¡
ResponderEliminar¡Qué maravilla¡...
Sabes, Kine, que conmigo siempre das en el clavo con la música, pues la clásica y el Jazz... es lo que más me mola...pero creo que ésto que hoy nos regalas es todo un presente para demostrarnos que nos quieres, ¡qué gozada¡
Y muchas felicidades por el blog, ¡que no te vayas¡ y no digo más.
Tres besos; uno por cada año.
Cuando algo me emociona mi mente se queda como bloqueada, alguna vez ya lo he comentado. Y así estoy después de escuchar esta maravilla. bloqueada.
ResponderEliminarBellísimo. Para reflexionar y hasta para echar una lagrimilla.
Gracias por compartirlo. Kine.
Un beso
Cierro los ojos y escucho..el cielo es gris y la lluvia golpea los cristales..pero después de éso..he pasado un momento mágico..
ResponderEliminar¡Gracias Kine ! :-)
Gracias, Marián y Myra. ¿Por qué será que se me están antojando a esta hora unos M&M's?...
ResponderEliminarMe alegra ver que os pueden emocionar las mismas cosas que a mí: piel de gallina. Y no es broma.
Besos por duplicado.
Mozart es lo que tiene... Muchas gracias también a ti, Abril. No te había visto... ;)
ResponderEliminarMozart?,mmm, no me suena, es bueno?.
ResponderEliminarCómo era eso que decían de su música.., que los movimientos alegres los había compuesto un genio y los lentos.., el mísmisimo Dios!.
Esas pausas antes de sus codas finales... pfff, hay que coger aliento!.
Este movimiento es maravilloso.
Yo quiero compartir con ustedes mi favorito de los movimientos lentos de los conciertos para piano de Mozart, el Adagio del n. 23:
http://www.youtube.com/watch?v=teZ6mA_hE-c
Elige al azar y acertarás, Mr. Lombreeze. Con Mozart sí. ¡Dios existe!
ResponderEliminarMis conciertos para piano preferidos son el 12 y el 21. Gracias por traernos el 23, un número que también me gusta mucho.
Saludos.
Qué delicioso, Kine, una obrita de arte que emociona más, si cabe, con esa lluvia que llama a los cristales esta noche.
ResponderEliminarGracias ;-)
Besitos y buen fin de semana.
Desde luego ayuda a concentrase en tareas tranquilas, en leer, relajarse...
ResponderEliminarUn saludo.
Me encanta la palabra parsimonia, hacía mucho que no la escuchaba, debe ser que ya no se lleva hacer las cosas con calma y disfrutando de ellas. Buen finde
ResponderEliminarGracias por pasar, Marisa y Valverde. Me alegra que os gustara. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana.
ResponderEliminarPues no deberían perderse las buenas costumbres, Aleste. Claro que, es mi forma de verlo...
ResponderEliminarBuen finde, amiga ;-)
Gracias, Kine, por estos minutos de paz.
ResponderEliminarNo hay palabras, he disfrutado y con eso ya está todo dicho.
Mil besos.
Esto sí que es para sentarse a disfrutar, con parsimonia. Delicatessen.
ResponderEliminarGracias a vosotros, Montse y Marcos.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.